Cuento: “El Juego de la Copa”.
Integrantes: Guadalupe Calleri, Micaela Nistal, Candela Olguin y Camila Valensise.
EL JUEGO DE LA COPA
La noche era fría y nosotras nos habíamos reunido en el departamento de Francesca para tomar unos tragos. Estaba en el cuarto piso y el viento hacía vibrar con fuerza los ventanales. Josefina se acercó a los vidrios y miró hacia fuera, hacia la ciudad iluminada y dormida.
-¿Saben qué?- dijo, entrecerrando los ojos porque estaba algo borracha-. Creo que esta noche es ideal para hacer el juego de la copa.
Las otras de inmediato expresaron su acuerdo. Todas menos yo, que de repente había palidecido y amenace con marcharse si insistían en jugar. Mi nerviosismo era tan patente que las otras dieron por terminada la iniciativa. Sin embargo, la curiosidad había picado y Fran me preguntó por qué sentía tanto rechazo por un simple juego.
-Por empezar, no es un simple juego- conteste, todavía nerviosa. Y luego les referí una historia que las dejó mudas de espanto.
Hace unos dos años atrás, en la habitación de una vieja casa, yo estaba con mis amigas realizando el famoso juego, y una de mis amigas me explicó. El juego de la copa es una variante simplificada de la tabla ouija, me dijo. Sobre una mesa cualquiera se pone una copa al revés y luego los participantes apoyan el dedo índice sobre ella. Supuestamente esto crea una fuerza invisible que atrae a todo tipo de espíritus. Las cosas alrededor se mueven, las velas se apagan, la copa misma comienza a deslizarse sin control sobre la superficie de la mesa. Pensé que era una pavada y reí divertida. Pero mi sonrisa se cortó de golpe cuando, una vez comenzado el juego, vi que las luces del techo titilaban. Mire a mis amigas; eran tres en total, cuatro conmigo, y todas las otras tenían los ojos cerrados y no parecían darse cuenta lo que había ocurrido. “Me deben estar jugando una broma”, pensé. Y lance una risita, dispuesta a no dejarme intimidar. Enseguida sentí que alguien a mis espaldas me daba un empujón, y una de mis amigas, que estaba a mi derecha, con una voz que no era humana dijo: “No te burles de los muertos, Josefina”. Mire hacia atrás. No había nadie. Sentí que la piel de mis brazos se me erizaba y de golpe tuve una intuición horrible: debajo de la mesa había alguien. No me atreví a levantar el mantel para mirar. Casi podía percibir la respiración de aquel ente, que lo sentía muy cerca de mis piernas, como agazapado. Trate de despegar mis dedos de la copa y levantarme, pero no pude. Parecía que mi dedo se había pegado a la copa, que ahora se movía sobre la mesa de un lado a otro. “Chicas, dejemos esto de una buena vez”, dije con voz temblorosa, pero ninguna de mis amigas abrió los ojos. Parecían sumidas en un trance muy profundo. “Chicas”, repetí, tratando de alzar la voz, “les digo que…
Entonces lancé un grito, cuando mis amigas abrieron los ojos parecían estar hipnotizadas, parecía como si alguien ser maligno se hubiera apoderado de sus almas; Y en coro horrible y perfectamente sincronizado me dijeron: “Abriste un portal hacia otro mundo, que muy pronto se cerrará. Pero tú siempre tendrás la llave”.
Por fin pude salir de mi parálisis y salí corriendo de la casa. Cuando las volví a ver, seguían siendo las de siempre y no parecían recordar nada.
-¿Qué habrán querido decir con eso de que siempre tendrás la llave?- me pregunto Fran, que había escuchado el relato en un horrorizado silencio, al igual que las demás.
-No lo sé.- dije, pero podríamos buscar la respuesta jugando nosotras mismas.
Y la pesadilla volvió a comenzar para mí y también para las demás.
FINAL ORIGINAL
Entonces lance un grito. Las caras de mis amigas se habían transmutado. Ya no eran adolescentes de dieciséis o diecisiete años, sino ancianas que parecían muertas desde hacía mucho tiempo. Las ancianas abrieron sus ojos al mismo tiempo, y en un coro horrible y perfectamente sincronizado me dijeron:
“Abriste un portal hacia otro mundo, que muy pronto se cerrará. Pero tú siempre tendrás
Autor: Mauro Croche.
1 comentario:
Integrantes: Guadalupe Calleri, Micaela Nistal, Candela Olguin y Camila Valensise.
Evaluación:
Este video me lo mostraron antes de entregar y les comenté que el sonido lo tenián que quitar porque la copa hacía ruido en el vidrio y emitía un sonido muy molesto.
No utilizaron el programa sqirlzmorph
Se escucha el sonido de la copa y la voz sale con eco y delay
Duración : 3:19
La ambientación es excelente
El guión no fue colocado como link sino que se copio y pegó incompleto en la entrada. No es la idea porque los post de esta manera son muy largos.
Utiliza carátula.
Al final del video los créditos están incompletos.
El audio al final se corta dejando al espectador alelado.
El autor es desconocido.
Se subtítulo copiando y pegando todo el cuento.
Finaliza el video con el texto "continuará", pero no se invita a leer el cuento
Nota Final: 4 (cuatro)
Prof Marisa Elena Conde
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